jueves, 27 de mayo de 2010

No creas que no me he dado cuenta de las cosas que no me dices, de las formas que me has cambiado, de las cosas que me has robado. No creas que no me he dado cuenta de que miras a otros cuerpos, de que juegas con otras sombras, que te esfumas cuando oscurece.

Me estas enseñando a ser una bestia humana.

No creas que no me he dado cuenta que tu lengua es una rapiña, que tus huesos me destrozan, que tu cuerpo me incinera. No creas que no me he dado cuenta que contigo me estoy pudriendo, que contigo me da lepra, que necesito un exorcismo.


Me estas enseñando a ser una bestia humana...





Caifanes.

sábado, 22 de mayo de 2010

Gone with the sin.

Hasta hoy no recuerdo un dolor más grande por el que haya pasado. El dolor corporal duele mucho, pero es momentáneo.
Pero el sufrimiento que siento ahora en mi mente y pecho, es como si mi corazón estuviera comiéndose a él mismo porque todavía tiene los recuerdos de ese amor que tanto lo destruyó. Se come a el mismo, para extinguirse y desintegrar los recuerdos en su memoria que lo volvió tan rojo en algún momento y no volver a sentir dicho sentimiento.

jueves, 20 de mayo de 2010

Ambivalencia.

Siento que llegaré a odiarte con muchas fuerzas. Pero el odiarte, me hace odiarme a mi también, porque es aceptar y darme cuenta que todavía te amo, es el darme cuenta que te odio porque te llegué a amar con todo lo que podía ofrecer, y me demoliste el corazón una y otra vez. No aguantare una reconstrucción más, prefiero quedarme en escombros.



Me dueles muchísimo, y me culpo también por mi inocencia. Al final todo renace y me reíre de ti más que de mi.

martes, 18 de mayo de 2010

Esta tormenta me atormenta.

Hoy llueve, es como si la Tierra entendiera mi sufrimiento. Solía gustarme la lluvia porque sentía que con cada gota, las plantas revivían y se hidrataban, refugio del sol. Pero hoy, justamente hoy llueve y siento que la Tierra esta llorando desconsolada porque no entiende como es posible que nosotros seamos la especie con más razón y entendimiento y a pesar de eso, seamos la especie más cruel y despiadada. Ha de estar dolida la Tierra, saber que nos endulza la respiración con las flores y que nos quiere deleitar con el sabor de sus frutos y que a cambio le demos destrucción.
Hoy lloro junto con la Tierra, lloro por las mismas razones por las que creo que ella sufre. Una vez más me han desmostrado que el ser humano es la especie más estúpida y fría. Una vez más he perdido la esperanza en que todavía quedan personas honestas, sin mascaras. Una vez más me han desgarrado el corazón y lastimado hasta el grado de sentir amargura. Es extraño como de un momento a otro un sentimiento tan hermoso como el cariño se puede transformar en enojo, impotencia, coraje y amargura. Hoy estoy molesta y dolida conmigo y contigo. Se las razones del porque pasó lo que pasó, maldita sociedad que ha distorsionado hasta lo más hermoso de la sexualidad hasta convertirla en comercio y consumismo. Es por eso que siempre he preferido a la naturaleza y a los animales, que al ser humano. El ser humano lastima conscientemente, los animales por instinto. Quiero despojarme de mis emociones, sentimientos, recuerdos, de este cuerpo tan débil y frágil. Hoy me duele tanto la lluvia, quisiera que entrara por mis oídos y mis ojos hasta llegar a mis recuerdos y ahogarlos. Cada vez que llueva, me recordará este día.Y es que a pesar de todo, te sigo amando y siento que mi corazón estará condenado a amarte.
Tu ausencia y la presencia de nuestros recuerdos me esta aniquilando. Siento que he perdido una parte importante de mi ser...
Aquí estoy, tambaleante pero no he caído.

lunes, 17 de mayo de 2010

Foco en el cielo oscuro.

Solía ser tu luna, aquella que te adormecía todas las noches con su esplendor y belleza.
Aquella que te miraba desde arriba y que bajaba hechizada por tus cantos y por tus dos pequeñas lunas en tu rostro.
Solía serlo...pero has dejado de ver el cielo cuando el Sol se esconde detrás del telón de la noche.
He dejado de brillar poco a poco y me he distanciado de mis estrellas.
Noches sedientas y hambrientas, bocas distantes, bocas húmedas.
Solo soy una luna siendo devorada por la inmensidad de la noche.
No más eclipses, no más danzas con el mar de la Tierra.
Solo reflejo la mitad de mi rostro, te necesito para ser luna llena.

He pintado en ti, lunares sobre el lienzo de tu piel. Así no me olvidarás nunca...
y te acordarás de volver a buscarme en cielo por las noches.